miércoles, 26 de noviembre de 2008

Artículo: ENTIENDA LA WEB 2.0 Y SUS PRINCIPALES SERVICIOS

Por Paul Anderson y publicado por JISC (Joint Information Systems Committee).

En 15 años la Web ha crecido y ha pasado de ser un grupo de herramientas de trabajo para los científicos del CERN a convertirse en un espacio global de información con más de mil millones de usuarios. En la actualidad está tanto volviendo a sus raíces como herramienta de lectura y/o escritura como entrando en una fase más social y participativa. Estas tendencias han generado la sensación de que la Web esta entrando en una “segunda fase”, una versión nueva y “mejorada”: la Web 2.0.

La introducción de la Web 2.0, vista como versión nueva y mejorada de la Web anterior y jalonada por el usuario es bastante nueva, podríamos decir que se remonta al 2006. Pero en lo que no hay acuerdo es en si esta aseveración es cierta o si al menos tiene fundamento sustancial, qué tanto obedece a una revolución publicitaria o a una revolución social y lo que es más, si verdaderamente se trata de una revolución en el sentido de un cambio radical. Además, qué significado puede tener para la educación, sector que ya está sintiendo los efectos de las exigencias del cambio generado por Internet.

Los invitamos a explorar algunas de las ideas, características y opiniones que se ocupan de ella.

En primera instancia debemos aclarar que Internet y la Web (WWW - World Wide Web) no son términos sinónimos. Según Wikipedia, Internet es un conjunto de redes de computadores interconectadas mediante alambres de cobre, cables de fibra óptica, conexiones inalámbricas, etc. Entre tanto, la Web es un conjunto interconectado, mediante hipervínculos y direcciones (URLs), de documentos y otros recursos. Internet posibilita el acceso a servicios como correo electrónico, transferencia de archivos por FTP, la Web (www), etc.
Ahora bien, la Web 2.0 es mucho más que una serie de nuevas tecnologías y servicios atractivos, así algunos de ellos sean importantes. Tiene como punto central un conjunto de por lo menos 6 ideas poderosas que están cambiando la forma en la que algunas personas interactúan [2]. Es importante darse cuenta también que esas ideas no necesariamente garantizan la existencia de la Web 2.0; de hecho, son un reflejo directo o indirecto del poder de la Red: los extraños efectos y las topologías que producen a nivel micro y macro mil millones de usuarios de Internet.

El término Web 2.0 lo acuñó oficialmente en 2004 Dale Dougherty Vicepresidente de O´Reilly Media Inc., durante una discusión de grupo sobre el potencial futuro de la Web. En ella se quería capturar el sentimiento de que a pesar del la burbuja de las “punto com” [3] y la posterior explosión de esta, la Web era más importante que nunca con novedosas y llamativas aplicaciones y llena de sitios que aparecían con sorprendente regularidad. Es importante anotar que el termino no se acuñó en un intento de capturar la esencia de un grupo de tecnologías (TIC), sino tratando de aprehender algo bastante más amorfo.

Hace su aparición aquí el segundo Tim quien continuó la anterior discusión en su hoy famoso escrito. En él identificó ciertas características que se han venido asociando con las tecnologías (TIC) del “software social” tales como: participación, el usuario como contribuyente, aprovechar el poder de la multitud, experiencias de usuario enriquecidas, etc. Pero es importante anotar que ellas no constituyen una (r)evolución Web de facto pues como lo señala Sir Berners-Lee, la habilidad para implementar esas tecnologías y servicios se basa en su totalidad en los estándares de la llamada Web 1.0 que simplemente han tomado más tiempo que el inicialmente anticipado para realizarse. Desde esta perspectiva la Web 2.0 debe considerarse no como algo diferente sino como una Web 1.0 con mayores implementaciones.

De acuerdo con la interpretación que hacen algunos, de las palabras del Sr. O’Reilly, aunque el termino sugiere una nueva versión de la Web, no se refiere a una actualización o a cambios técnicos específicos de esta, sino a modificaciones hechas por los desarrolladores de software y a la(s) manera(s) en que los usuarios finales utilizan la Web.


SERVICIOS Y APLICACIONES CLAVE DE LA WEB 2.0

Un número de nuevos servicios y aplicaciones basados en la Red, que en alguna medida se están utilizando en educación, demuestran su fundamentación en el concepto de Web 2.0. No son realmente programas como tales, sino servicios o procesos de usuario construidos usando porciones de programas y estándares abiertos soportados por Internet y la Web. Estos incluyen Blogs, Wikis, sindicación de contenido, “podcasting”, servicios de etiquetado (tagging) y el compartir recursos multimediales. Muchas de estas aplicaciones de la Web están bastante maduras y se han venido utilizando durante varios años. Sin embargo, nuevas apariencias (formas) y capacidades se les adicionan con regularidad. Vale la pena anotar que muchos de esos nuevos programas son concatenaciones que utilizan servicios ya existentes. A continuación presentamos y hacemos una revisión de los servicios más conocidos y utilizados.


BLOGS (bitácora, en español): un blog es un sitio Web que facilita la publicación instantánea de entradas (posts) y permite a sus lectores dar retroalimentación al autor en forma de comentarios. Las entradas quedan organizadas cronológicamente iniciando con la más reciente.

WIKIS.- Un Wiki (denominación que parece venir de la palabra hawiana wikiwiki que significa rápido o veloz) es una página Web o un conjunto de páginas Web que cualquier persona a quién se le permita el acceso puede editar fácilmente desde cualquier lugar.

ETIQUETADO Y “SOCIAL BOOKMARKING”.- Una etiqueta (tag en inglés) es una palabra clave que se le adiciona a un objeto digital; por ejemplo, a un sitio web, una fotografía o un clip de video, para describirlo, pero no como parte de un sistema formal de clasificación sino de nuevas maneras que posibilitan a cualquier persona encontrar información. Por su parte, “Social Bookmarking” es una forma en la que los usuarios de Internet almacenan, organizan (etiquetan), comparten y buscan páginas Web de interés para ellos.

FOLKSONOMY.- Folksonomy (folksonomía en español), término acuñado por Thomas Vander Wal (Folk = Gente + Taxonomía), es el resultado del etiquetado, individual y libre, de cualquier contenido digital que tenga una dirección Web (URL), con fines de recuperación futura.

MULTIMEDIA SHARING (compartir multimedia).- Una de las mayores áreas de crecimiento en la Web se ha dado en servicios que facilitan almacenar y compartir contenido multimedial. Ejemplos bastante conocidos son YouTube (videos);Flickr (fotografías) y Odeo (podcasts).

AUDIOBLOGGING Y PODCASTING: La palabra podcast proviene de la contracción de los términos “iPod” (reproductor MP3 de Apple) y “broadcast” (emisión). Inicialmente hacían referencia a grabaciones de audio utilizadas para adicionar audio streams [5] a los incipientes blogs que en su momento se llamaron “audio blogs”. Más recientemente, el término se amplio para incluir las grabaciones de video, que se llamaron “videopodcast”.

RSS Y SINDICACIÓN.- El RSS (Really Simple Sindication) hace referencia a un estándar de sindicación, esto es a una familia de formatos de datos conocidos como: “feed”, “Web feed” o “chanel” utilizados para ofrecer a los usuarios información de contenido que se actualiza con mucha frecuencia, tales como entradas de Blogs, titulares de medios o podcasts.

ÚLTIMOS SERVICIOS Y APLICACIONES WEB 2.0
Queremos simplemente llamar la atención que en los últimos meses se ha presentado una oferta muy abundante de nuevas ideas y servicios, además de una serie de compañías incipientes dedicadas a expandir servicios de la Web ya existentes. Por supuesto, algunas de estas ideas y servicios se consolidarán y otras desaparecerán. Así mismo, algunos tendrán mayor relevancia e importancia para la educación que otros. Lo cierto es que actualmente existe una sobreoferta que dificulta hacer un cuidadoso seguimiento de todo lo que está disponible.

CRÉDITOS:
Traducción realizada por EDUTEKA de apartes del Libro “What is Web 2.0? Ideas, technologies and implications for education" escrito por Paul Anderson y publicado por JISC (Joint Information Systems Committee). Descargue el reporte completo en formato PDF (inglés): http://www.jisc.ac.uk/media/documents/techwatch/tsw0701b.php

martes, 25 de noviembre de 2008

Muestra de Campañas Publicitarias 2008

Demostrando su creatividad, conocimientos y entusiasmo, los alumnos de Ciencias de la Comunicación del séptimo trimestre llevaron a cabo la presentación de sus campañas publicitarias realizadas a lo largo del trimestre, correspondiente a la materia de Publicidad.


Diez campañas distintas y novedosas fueron exhibidas en el Aula Magna por los grupos de comunicación 01 y 02, matutino y vespertino respectivamente.

Los alumnos mostraron la manera en la que se conforma y lleva a cabo una campaña publicitaria, presentaron spots televisivos, de radio, postres, banners y variados medios por los cuales llevarían su producto al público.


Con la presencia de la Coordinadora de la carrera de comunicación, la Lic. Edna Karina Miranda, diferentes profesores del área de comunicación, y alumnos de distintas carreras y trimestres, los alumnos demostraron sus ideas y conocimientos adquiridos a lo largo del trimestre, asesorados por el Lic. Edgar Ramírez, profesor de dicha materia.


Con este evento se da por terminado el curso de publicidad para los alumnos de séptimo trimestre de comunicación, mostrando de forma creativa y práctica la capacidad de los jóvenes comunicólogos como futuros publicistas.
















Aqui el grupo de inquietos y creativos alumnos de los grupos 01 y 02 que montaron la muestra de Campaña Publicitaria y la Lic. Karina Miranda Mondaca, envía un mensaje a los expositores

viernes, 7 de noviembre de 2008

7ma. Feria del Libro Los Mochis 2008

Programa General de Actividades del 9 al 16 de Noviembre a realizarse en la Plazuela "27 de Septiembre"

Artículo: La Generación Google

La “Generación Google” es un término popular que hace referencia a la generación de jóvenes nacidos después de 1993, que crece en un mundo dominado por Internet.

Actualmente la mayoría de los estudiantes que entran a la educación superior son más jóvenes que el microcomputador, y se sienten mejor escribiendo con el teclado que haciéndolo en un cuaderno de espiral, también prefieren leer en la pantalla del computador que hacerlo de papeles que sostienen con sus manos. La conectividad constante, estar en contacto permanente con amigos y familia, en cualquier momento y desde cualquier lugar, es para ellos de la mayor importancia [1].

Según Wikipedia, esta denominación se ha popularizado como compendio de “vía rápida para referirse a una generación cuyo primer punto de contacto con el conocimiento es Internet y un motor de búsqueda, siendo Google el más popular de estos últimos”. Esto contrasta con generaciones anteriores que “adquirían su conocimiento mediante libros y bibliotecas convencionales”.

Más adelante en este reporte, lidiaremos con algunos de los mitos y realidades que rodean la Generación Google, y exploraremos algunos de ellos, pero lo cierto es que esta denominación tiene una atractivo fuerte e innegable.

Algunos titulares sobre los hallazgos de una encuesta reciente hecha por OCLC [2],sugieren que los estereotipos que implica el término pueden ser relativamente ciertos:

89% de los estudiantes de educación superior utilizan los motores de búsqueda para comenzar a buscar información, solo el 2% inicia esa misma búsqueda en el sitio web de una biblioteca
93% están o satisfechos o muy satisfechos con la experiencia general de usar motores de búsqueda, situación que contrasta con la satisfacción del 84% respecto de las búsquedas apoyadas por un bibliotecólogo
los motores de búsqueda se acomodan mejor al estilo de vida de los estudiantes de educación superior que las bibliotecas físicas o en línea y ese acomodo es “casi perfecto”
los estudiantes de educación superior todavía utilizan la biblioteca, pero lo hacen con menor frecuencia, al igual que la lectura de materiales de esta, desde que comienzan a usar herramientas de búsqueda por Internet
los “libros” son todavía la primera asociación que hace este grupo con la biblioteca, a pesar de la considerable inversión de esta en recursos digitales; la situación anterior en buena medida la desconocen los estudiantes

Estos hallazgos, que concuerdan bastante con los encontrados por la investigación CIBER [3] sobre el comportamiento informativo de los jóvenes, como lo revela el análisis de archivos de registro histórico (web log files), despierta enormes interrogantes a los proveedores de información y ofrece el contexto de políticas para este estudio. Existen grandes preocupaciones en el campo educativo, en particular, el interrogante de si ¿disponer de los “datos al alcance de los dedos” y el exceso de información se da a expensas del pensamiento creativo e independiente’

¿QUÉ SABEMOS SOBRE EL COMPORTAMIENTO INFORMATIVO DE LOS JÓVENES?
La investigación sobre ¿cómo niños y jóvenes desarrollan competencia en el uso de Internet y de otras herramientas de búsqueda? da resultados poco claros, aunque algunos temas consistentes comienzan a emerger [4]

El alfabetismo informático (CMI) de los jóvenes, no ha mejorado con el incremento del acceso a las TIC: de hecho, su aparente facilidad para manejar computadores, esconde algunos problemas preocupantes.
Investigaciones de Internet muestran que la velocidad a la que los jóvenes buscan en la Web conlleva a que se destine poco tiempo a evaluar la información encontrada tanto respecto a su relevancia como respecto a su exactitud o autoridad.
Los jóvenes tienen una comprensión pobre de sus necesidades de información y por ello encuentran dificultades para desarrollar estrategias de búsqueda efectivas.
Como resultado, demuestran preferencia fuerte por expresarse con lenguaje natural en lugar de analizar cuáles palabras claves pueden resultar más efectivas.
Enfrentados a una larga lista de resultados de búsqueda, a los jóvenes se les dificulta evaluar la relevancia de los materiales encontrados y muchas veces imprimen páginas a las que solo han dado una mirada superficial.

En sentido literal, todos somos hoy en día generación Google: los datos demográficos de consumo tanto de Internet como de medios, horadan rápidamente esa presunta diferencia generacional. La evidencia indica que cada vez más personas, de todos los grupos de edad, usan Internet y tecnologías de la Web 2.0 para una variedad de propósitos. Los jóvenes, no solo los de la generación Google sino también los de la generación Y (una más adelante), pudieron ser los primeros usuarios pero en la actualidad las personad de más edad los están alcanzando rápidamente... son los llamados navegadores plateados. En muchos casos la etiqueta de generación Google es cada vez más incorrecta según lo indican los hallazgos de investigaciones recientes y parece inadecuada, hasta para la cohorte de jóvenes que pretende estereotipar.

Virtualmente, el 100% de los estudiantes usan el Procesador de Texto e Internet para sus trabajos de clase. Pero la percepción de competencia sólida se diluye cuando se revelan los porcentajes para otras aplicaciones, tales como el desarrollo de Presentaciones (65%); Hojas de Cálculo (63%); Gráficas (49%) o creación de páginas Web (25%) [26].

Nuestra conclusión general es que mucho de lo escrito sobre ese tema en este reporte sobrestima el impacto de las TIC en los jóvenes y demerita el efecto de estas en las generaciones mayores. El tema requiere mucho mayor balance.

Un tema persistente en la literatura de Competencia en Manejo de Información (CMI), sostiene que necesitamos un mapa mental bien desarrollado para poder usar efectivamente las herramientas de búsqueda en Internet [28]. Necesitamos no solamente una comprensión amplia de cómo funcionan los sistemas de recuperación de información y cómo se representa en las bases de datos bibliográficas o de textos completos, sino además algún conocimiento de la naturaleza del espacio informativo y de qué manera se escribe en este; la gramática y la estructura de las frases contribuye a las búsquedas efectivas.

Investigaciones con el uso de Internet muestran que la velocidad con la que los jóvenes buscan en la Web indica que se dedica muy poco tiempo en evaluar la información tanto en su pertinencia, precisión y autoridad y se ha observado a los niños imprimir y usar páginas de Internet a las que solo les han dado una mirada superficial. También han observado los investigadores que los jóvenes, consistentemente, le dan poca importancia al tema de la idoneidad del autor. Un estudio mostró que muchos adolescentes pensaban que si la página estaba indexada en Yahoo tenía que provenir de un buen autor y en consecuencia no se cuestionaban al respecto. Otros estudios también han encontrado poca atención en confirmar la veracidad de la información encontrada.

El hallazgo más significativo de nuestro estudio fue que aunque los docentes entrevistados eran Competentes en manejo de Información (CMI), sus habilidades con ese alfabetismo y sus actitudes al respecto no se estaban transfiriendo a sus discípulos. [29]

Dos mensajes poderosos emergen de las últimas investigaciones: Cuando se comparan, en relación con sus habilidades en alfabetismo en información (CMI), los cuartiles más alto y más bajo obtenidos por los estudiantes, se evidencia que el cuartil superior reporta una mayor exposición a habilidades básicas de uso de bibliotecas por parte de sus padres, en la biblioteca escolar, el aula o bibliotecas públicas durante sus primeros años de vida. Parece que en los Estados Unidos se estuviera abriendo una nueva brecha, en la que los mejores estudiantes obtienen el premio de las notas más altas. En la parte más baja del espectro de las habilidades en información, la investigación encuentra que cuando se interviene en edad universitaria esta ya es muy tarde, esos estudiantes ya han desarrollado un comportamiento para enfrentar esta situación que está muy arraigado, aprendieron a “arreglárselas” con Google.

Los hallazgos de estos estudios plantean preguntas sobre la habilidad de las Instituciones Educativas e Instituciones de nivel superior para ayudar a la generación Google a desarrollar las habilidades de búsqueda, al nivel adecuado para que cumplan con las demandas de la educación superior y de la investigación.


NOTAS:
[1] Jason Frand, The information mindset: Changes in students and implications for higher education, EDUCAUSE Review, March / April 2006, p.15.
[2] College Students’ Perceptions of the Libraries and Information Resources: A Report to the OCLC Membership. Dublin, OH: OCLC, 2006.
[3] CIBER Work Package IV, passim.
[4] CIBER Work Package II, pp. 8-11.
[5] Andrew Large, Children, Teenagers and the Web. Annual Review of Information Science and Technology, 39(1) 2006, pp. 347-392.
[13] CIBER Case Study I: An Evaluation of BL Learning: A Website for Younger Scholars. London: CIBER, 29 November 2007.
[14] CIBER Case Study II: A User Evaluation of Intute. London: CIBER, 29 November 2007.
[15] Diana Oblinger and Brian Hawkins, EDUCAUSE Review, March/April 2006, p.12
[17] John Horrigan. A Typology of Information and Communication Technology Users. Washington, DC: Pew Internet and American Life Project, 7 May 2007.
[18] Sharing, Privacy and Trust in Our Networked World: A Report to the OCLC Membership. Dublin, OH: OCLC, 2007.
[19] Sarah Ann Long, Digital natives: if you aren’t one, get to know one, New Library World, 106(1210/1211) 2005, pp. 187-189.
[20] Synovate. Leisure Time: Clean Living Youth Shun New Technology. Available online at www.synovate.com/current/news/article/2007/02 [13 December 2007].
[21] Communications Market Report: Converging Communications Markets. Ofcom, August 2007.
[24] Synovate. Leisure Time: Clean Living Youth Shun New Technology. Available online at www.synovate.com/current/news/article/2007/02 [13 December 2007].
[25] CIBER Work Package II, pp. 3-5.
[26] Diana Oblinger and Brian Hawkins, EDUCAUSE Review, March/April 2006, p.12
[27] CIBER Work Package II, pp. 8-10.
[28] Andrew Large, Children, Teenagers and the Web. Annual Review of Information Science and Technology, 39(1) 2006, pp. 347-392.
[29] Lucy Merchant and Mark Hepworth, Journal of Librarianship and Information Science 34(2) 2002, p.81.
[30] See, for example, Melissa Gross and Don Latham, Attaining information literacy: An investigation of the relationship between skill level, self-estimates of skill, and library anxiety. Library and Information Science Research 29(3) 2007, pp. 332-353.


CRÉDITOS:
Traducción libre de EDUTEKA del estudio “Information behaviour of the researcher of the future”, contratado por JISC y la Biblioteca Británica. Fue publicado originalmente en enero de 2008 en el sitio Web de la Universidad de Londres .
Documento completo disponible en:
http://www.eduteka.org/pdfdir/GeneracionGoogle.pdf